Noticias

Cada dos minutos muere una mujer durante el embarazo y el parto: Afrontar una crisis mundial de salud materna

Una mujer embarazada con túnica morada yace en una cama de hospital dentro de una tienda verde. Una mujer sentada a su lado en la cama le revisa las piernas en busca de signos de edema
Sajni, de 20 años, recibió atención prenatal en un campamento médico móvil apoyado por el UNFPA situado en un campamento de desplazados en Sindh, Pakistán. © UNFPA Pakistán/Shehzad Noorani
  • 07 de abril de 2025

NACIONES UNIDAS, Nueva York – 712 mujeres mueren de media cada día durante el embarazo o el parto, lo que equivale a una mujer cada dos minutos, según un nuevo informe de las Naciones Unidas. Publicado hoy, este informe concluye que 260.000 mujeres murieron en 2023, el año más reciente para el que disponemos de estimaciones.

Casi todas esas muertes podrían haberse evitado. Los avances médicos a la hora de prestar una atención de maternidad respetuosa y cualificada, junto con la creciente reivindicación por parte de las mujeres de sus derechos sexuales y reproductivos, han logrado que el embarazo y el parto sean más seguros ahora que en cualquier otro momento de la historia. ¿Pero por qué siguen muriendo tantas mujeres y niñas al dar a luz?

«Las muertes maternas no son un misterio médico, sino una injusticia mundial», afirmó la Dra. Natalia Kanem, Directora Ejecutiva del UNFPA. 

Avances, pero no para todas

Concretamente, las últimas estimaciones presentan un descenso significativo, del 40%, con respecto a las 443.000 muertes maternas que se produjeron en el año 2000. Las muertes maternas se dispararon durante los peores momentos de la pandemia de COVID-19; sin embargo, estas tasas de mortalidad, afortunadamente, han disminuido. Pero el mundo sigue lejos del Objetivo de Desarrollo Sostenible de la ONU de reducir la mortalidad materna a 70 muertes por cada 100.000 nacidos vivos para 2030. De hecho, el ritmo actual de reducción es de aproximadamente un 2% anual; para alcanzar el objetivo acordado a nivel mundial, las muertes maternas deberían disminuir cerca de un 15% cada año.

Un problema fundamental es que los avances han sido muy desiguales y, en algunos países, incluso ha habido retrocesos.

En 2023, más del 43% de todas las muertes maternas se produjeron en los países más pobres, en parte debido a la falta de atención cualificada. Además, las niñas y las mujeres embarazadas más vulnerables viven en entornos frágiles y afectados por conflictos; 37 países asolados por la violencia y la fragilidad registraron el 61% de todas las muertes maternas en 2023.

Una mujer con un pañuelo a rayas sostiene en brazos a un recién nacido. Está sentada en el suelo de una tienda de campaña junto a otra mujer y kits de higiene personal con el logotipo del UNFPA
Embarazada de nueve meses, Amina (izquierda) huyó de su casa en el estado de Aj Jazirah cuando estalló la violencia a su alrededor. Finalmente dio a luz en el suelo de la casa de un desconocido. ©UNFPA Sudán

Los trabajadores sanitarios de primera línea llevan mucho tiempo alertando sobre los peligros de dar a luz en este tipo de entornos. En el estado sudanés de Al Jazirah, una partera llamada Awatef contó al UNFPA que había ayudado a cuatro mujeres a dar a luz mientras huían de la violencia: «Los bebés nacieron en el monte, con una esterilización muy básica; no tenía más que agua y jabón». 

Una mujer, Amina, tuvo que dar a luz por cesárea, en el suelo de la casa de un desconocido donde un médico local atendía los partos, mientras escuchaba el sonido de los disparos en el exterior. «Tuve que empezar a caminar de nuevo sólo seis horas después, cargando a mi bebé mientras mis heridas aún estaban frescas y me dolían», relató.

La discriminación y la desigualdad de acceso por motivos de ubicación, ingresos, raza o etnicidad también privan a las mujeres tanto de sus opciones sexuales y reproductivas como de una atención materna adecuada. Esto se produce incluso en los países más ricos con niveles de atención sanitaria en su mayoría elevados; en ellos, las tasas de mortalidad materna se concentran entre las mujeres más marginadas.

Una partera con bata blanca y pañuelo en la cabeza habla en primer plano; detrás de ella hay muchas otras parteras con bata blanca
Un aula llena de parteras recién formadas en el Hospital Obstétrico y Ginecológico de Damasco, en Siria. La formación, el despliegue y el empoderamiento de las parteras podría evitar dos tercios de todas las muertes maternas y neonatales y mortinatos. © UNFPA Siria/Alaa AlGhorra

Derecho a una asistencia sanitaria cualificada 

Sin embargo, existen soluciones asequibles y eficaces. Una iniciativa lanzada hoy destaca que más de dos tercios de todas las muertes maternas y neonatales y mortinatos podrían evitarse con una atención de partería de calidad. Sin embargo, sigue habiendo una escasez crónica de 900.000 parteras en todo el mundo. 

Colmar esta laguna no sólo salvaría vidas, sino que sería rentable. Los expertos llevan tiempo señalando que cada dólar invertido en partería genera un retorno de hasta 16 veces en beneficios económicos y sociales.

El UNFPA ha sido testigo del poder transformador de las parteras que han desempeñado un papel clave en la reducción de la mortalidad materna en la República Unida de Tanzanía, donde ha disminuido en más de un 50%, y en Sierra Leona, donde se ha reducido en casi un 80%. Pero con los recortes masivos en la financiación mundial que amenazan los servicios esenciales, estos logros son frágiles y los avances conseguidos con tanto esfuerzo corren el riesgo de echarse a perder. 

La iniciativa de hoy, desarrollada conjuntamente por el UNFPA, la Confederación Internacional de Matronas (ICM), Jhpiego, UNICEF y la OMS, es el «Acelerador de partería», una hoja de ruta para formar a más parteras, desplegarlas donde más se necesitan y garantizar que estén bien equipadas, apoyadas e integradas en los sistemas nacionales de salud.

«Demos prioridad a las inversiones para llegar a cero muertes maternas evitables», declaró la Dra. Kanem. «Comprometámonos a construir sociedades más sanas y justas y a garantizar que todas las mujeres que traen una vida a este mundo puedan sobrevivir al parto y gozar de buena salud posteriormente».

Utilizamos cookies y otros identificadores para mejorar su experiencia en línea. Al utilizar nuestro sitio web usted acepta esta práctica, consulte nuestra política de cookies.

X